Prueba de asiento en la nueva Clase G

La nueva Clase G de Mercedes-Benz (W464) también será reconocible como tal a primera vista. Para casi todo el mundo que no se fije bien en el icono, también tendrá el mismo aspecto de siempre. La Clase G lleva en el mercado desde 1979 y el principio se ha mantenido inalterado desde su introducción. Un vehículo robusto sin límites perceptibles. Pero en el interior, las cosas han cambiado por primera vez. ¿Quieres comprar un coche de ocasión en Almería? En el concesionario Crestanevada de coches de segunda mano en Almería podrás encontrar el coche de tus sueños al mejor precio.

Típico G por fuera, todo nuevo por dentro

 

La vista del habitáculo como conductor le hace olvidar por un momento que está sentado en la nueva Clase G (W464). Porque ya no es como antes. El carácter robusto se ha perdido en su totalidad, pero en los detalles se vuelve a reconocer rápidamente al todoterreno puro. En la consola central, en una posición casi inalterada, se encuentran los tres interruptores de los tres cierres. El asidero para el pasajero también sigue donde siempre.

 

Interior del W464 también opcional con doble pantalla

 

Pero falta algo en la consola central: la palanca selectora de marchas. Como es habitual en Mercedes-Benz, se sitúa directamente detrás del volante. El resultado es uno de los muchos nuevos compartimentos portaobjetos de la Clase G. Además, los pasajeros de los asientos traseros pueden disfrutar de 15 centímetros más de espacio para las piernas. Una mirada al salpicadero transporta al típico propietario de la Clase G del pasado al presente. Opcionalmente incluso totalmente digital con las conocidas dos pantallas de 12,3 pulgadas, la robusta Clase G también se beneficia de los últimos desarrollos de Daimler AG. Ambas pantallas se controlan directamente en el volante mediante los sensibles botones táctiles, que se introdujeron por primera vez en la Clase E. El resto del volante se introdujo con la última Clase S.

 

Por lo demás, el confort de mayor calidad se nota en la versión expuesta. Nuevos asientos, nueva tapicería, nuevo ambiente. El robusto todoterreno se convierte en un oasis de bienestar en el campo entre el barro y los escombros. Incluyendo el nuevo sistema de sonido Burmester, el nuevo interior casi puede competir con los modelos SUV convencionales de Daimler AG. Aquí también se ha escondido una pequeña alusión clara a la Clase G. Las salidas de aire exteriores, junto con los altavoces de agudos (tweeters) del salpicadero, pretenden simbolizar la cara del G.