Con el BMW Serie 8 E31, la empresa de Múnich abrió nuevos caminos a mediados de 1989: el coupé de lujo situado por encima de la Serie 7 pretendía abrir grupos de clientes completamente nuevos para BMW y, con su llamativo diseño, todavía hoy despierta esperanzas de coche deportivo. Sin embargo, el vehículo se centraba claramente en el lujo y la alta tecnología; la Serie 8 nunca pretendió ser un auténtico deportivo.
Este año, el BMW Serie 8 Coupé celebra su 25 cumpleaños, motivo por el cual el pasado fin de semana tuvo lugar una gran reunión con un total de 120 vehículos en las inmediaciones del BMW Welt de Múnich. A la reunión del BMW Serie 8 asistieron el ClubE31 Worldwide Owners Group e.V. y el BMW Serie 8 Club 8er.org. Incluso viajaron aficionados y amigos del Serie 8 desde EE.UU., Islandia y Nueva Zelanda. Algunos propietarios del Serie 8 de España recorrieron hasta 2.500 kilómetros con su vehículo para poder asistir a la reunión.
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El BMW 850i se presentó por primera vez en el Salón Internacional del Automóvil de 1989, y poco después se convirtió en el segundo automóvil alemán de la posguerra con motor V12 (dos años después del BMW 750i) en salir a la venta. Además del motor de doce cilindros, impresionaban el capó plano con faros empotrados, el eje trasero integral con suspensión de cinco brazos, el sistema automático de control de estabilidad y tracción ASC+T, la dirección asistida en función de la velocidad y el control electrónico de la amortiguación (EDC), que se ofrecía como opción a partir de la primavera de 1990.
Al 850i de 300 CV se unió en 1993 el BMW 850 CSi de 381 CV y doce cilindros, que también introdujo en la producción en serie el eje trasero autodireccional (Cinemática Activa del Eje Trasero – AHK), un precursor de la Dirección Activa Integral, disponible hoy en día para los modelos de las Series 5, 6 y 7. Otros cambios en la gama de motores dieron lugar a los modelos 850 Ci y 840 Ci (con motor V8), pero el prototipo BMW M8 con 550 CV, que parecía listo para la producción, nunca se fabricó en serie.
A pesar de su innovadora tecnología, el BMW Serie 8 E31 no fue un gran éxito comercial. En diez años de producción, se construyeron 30.621 unidades del Serie 8. Más de dos tercios de los Serie 8 construidos llevaban un motor V12 bajo el capó, y cinco de cada seis vehículos se pidieron con un cambio automático de cuatro o cinco velocidades. Los 1.510 ejemplares del modelo V12 superior, el BMW 850 CSi, sólo estaban disponibles con transmisión manual de seis velocidades.